Elimina sus fuentes de comida y agua, así como sus escondites:
- Elimina los restos de comida y los alimentos que estén al descubierto, sobre todo cerca de los electrodomésticos.
- Guarda la comida en recipientes herméticos.
- No dejes platos sucios en el fregadero.
- Saca la basura con regularidad y cierra bien las bolsas.
- Tira a la basura las cajas y los periódicos viejos (sirven de escondrijo para las cucarachas).
- Limpia y aspira periódicamente detrás de hornos, microondas, tostadoras y neveras.
- No lleves comida a los dormitorios ni al salón.
- Mantén secas las zonas de almacenamiento.
Sella los huecos por donde puedan entrar en tu casa:
- Tapa todas las grietas donde puedan esconderse cucarachas.
- Sella los huecos a través de los cuales puedan acceder a tu casa desde viviendas adosadas.
Evita errores habituales al usar productos contra cucarachas:
- Si utilizas cebos o gel, no los coloques en zonas donde hayas utilizado espráis o insecticidas líquidos. Las cucarachas que se muevan por esas zonas morirán antes de poder llevar el cebo hasta el nido.
- Nunca apliques espráis o insecticidas líquidos sobre los cebos y el gel; las cucarachas no se lo comerán.
- Si utilizas cebos o gel, elimina todo rastro de comida o agua para que las cucarachas caigan en la trampa.
- Sustituye los cebos con la frecuencia indicada en la etiqueta o cuando las cucarachas se los hayan comido del todo.
- Cuantos más cebos pongas y cuanto más cerca los coloques del lugar donde se esconden las cucarachas durante el día, mejor controlarás la plaga.